La Cirugía Pexia Testicular se realiza en los casos en que los testículos no han bajado hasta la posición correcta en el escroto.
Cuando el bebé nace los testículos deben haber descendido al escroto; sin embargo a algunos niños uno o los dos testículos no bajan a su posición adecuada, por lo que en estos casos se da tiempo a su primer año de vida y sino descienden naturalmente deben ser intervenidos quirurgicamente.
La Cirugía Pexia Testicular consiste en una pequeña incisión (corte) en el área superior de la pierna ( ingle), dónde en la mayoría de casos se alojan los testículos no descendidos. Luego se moverá suavemente el testículo del niño hacia dentro del escroto. La operación dura aproximadamente una hora por testículo.
Como usualmente la operación es ambulatoria, el niño sólo requerirá unas horas para despertar de la cirugía y volver a casa.
Cuidados después de la operación
Después de la operación, es probable que el niño sienta dolor en la ingle, se le puede dar algún medicamento que el doctor le haya preescrito.
Los niños mayores usualmente indican si sienten dolor, pero con los más pequeños hay que deducirlo, por eso preste atención a los siguientes signos:
- Gran irritabilidad
- Transpiración acentuada
- Coloración pálida de la piel
- Rehusarse a caminar o dificultad para caminar
- Comportamiento inusualmente tranquilo
Es posible que estas molestias se den en los primeros días posterior a la operación, porque el escroto del niño está hinchado y amoratado; pero pocos días después debe quitarse la molestia, si esto no ocurre y su niño alguno de estos signos, preste atención:
- aumento del dolor en la línea de incisión
- enrojecimiento de la línea de incisión
- tumefacción o hinchazón en la línea de incisión
- secreción líquida en la línea de incisión
- fiebre de más de 38,5 °C
- vómitos
- dolor de estómago
- pérdida del apetito
- cansancio o falta de energía
Si su niño tiene uno o más de estos signos es mejor consultar al pediatra, debido a que puede tratarse de una infección en la herida.