Las Articulaciones son los puntos de unión entre las partes que constituyen el sistema óseo (huesos, cartílagos, dientes) que ayudan a realizar los movimientos mecánicos, a tener flexibilidad y plasticidad; sin embargo éstas pagan el precio de la fuerza que imprimen los músculos en cada movimiento.
Las articulaciones sobre todo las inferiores en cadera, rodillas y tobillo son las que llevan el mayor peso corporal que las superiores; esa tensión que sufren con movimientos como caminar es lo que provoca tarde o temprano su desgaste. De ahí que sea tan importante cuidarlas, para prolongar al máximo posible su buen funcionamiento.
Para esto es importante cuidar el peso corporal, ya que el sobrepeso genera sobrecarga en el organismo y provoca el desgaste mecánico. Comer saludablemente alimentos ricos en calcio, proteína y vitaminas A, C y D y combinarlo con una práctica regular de ejercicios puede ayudarte a la pérdida de peso y a mantener en buen estado tus articulaciones.
Este por cuanto, el ejercicio físico vigoriza y ayuda a crecer los músculos, los cuales a su vez ayudan a proteger las articulaciones y evitan el desgaste de los cartílagos; sin embargo se debe tener cuidado al realizar ejercicios, ya que éstos deben ser suaves y sostenidos, no se debe entrenar si se está sintiendo dolor, porque puedes exponerte a una lesión.
Otro aspecto importante es cuidar la postura corporal sobre todo en aquellas posiciones más frecuentes como: sentarse, alzar cosas o agacharse, eso puede hacer una diferencia.
Otra forma de cuidado es tener un día de descanso, esto le permitirá a los músculos y articulaciones recuperarse después de varios días de sobrecarga, además de que se puede aprovechar para realizar ejercicios de movilidad articular o flexibilidad.
Evita el consumo de alcohol y tabaco, ya que pueden afectar tu organismo de manera general y acelerar el proceso de envejecimiento de tus órganos.
Si estás sintiendo dolores o incomodidad en tus articulaciones, es importante visitar al médico quien valorará tu condición para recomendarte el medicamento o ejercicios necesarios para fortalecerlas.
En Clínica Santa Teresa le ofrecemos el servicio de diagnóstico, puede comunicarse con nosotros al ☎ 2798-0100 / 2798-2100 o escribirnos al WhatsApp 8841-7085 o a nuestro inbox.
La artrosis de rodilla se da cuando el cartílago que protege y amortigua los extremos de los huesos de la rodilla se desgastan, produciendo un gran dolor al paciente porque al quedar descubiertos se frotan uno contra otro. Cuando esto sucede el organismo para compensar la pérdida del cartílago, hace que los huesos dañados empiecen a crecer formando espolones.
La artrosis es la enfermedad degenerativa más común de la rodilla. El desarrollo de la enfermedad es lento, doloroso y tiende a empeorar con el tiempo. Aunque no existe una cura para esta enfermedad, hay varios tratamientos que ayudan a controlar el dolor, a mantenerse activo y a mejorar la calidad de vida.
Los síntomas más frecuentes de este padecimiento son el dolor y la rigidez, los cuales tienden a empeoran por la mañana o después de un período de inactividad.
¿Qué factores favorecen la aparición de esta enfermedad?
Predisposición genética: Debido a la frecuencia de artrosis en la población general y de su amplia heterogeneidad clínica, la exacta contribución genética a la patogenia de la artrosis ha sido difícil de analizar. Incluso, parece claro que a la frecuencia y severidad de la artrosis pueden contribuir múltiples factores genéticos que pueden diferir según la articulación.
Edad: Es un factor de riesgo con clara relación. Como explicación se encuentra el estrés mecánico sobre el cartílago articular y factores concomitantes tales como: debilidad muscular, cambios en la propiocepción, entre otros.
Obesidad: hay evidencia comprobada de la relación entre obesidad y artrosis de rodilla, en la que influyen factores mecánicos asociados a los genéticos y metabólicos.
Menopausia: algunos autores relacionan la pérdida de estrógenos con la artrosis debido al aumento de la prevalencia de esta enfermedad en las mujeres postmenopáusicas, aunque es un tema controversial.
Enfermedades endocrinas: la diabetes mellitus, la acromegalia, el hipotiroidismo y el hiperparatiroidismo pueden favorecer el desarrollo de artrosis.
Los datos fundamentales que permiten el diagnóstico de la artrosis son los síntomas que la persona refiere y las alteraciones que observe el médico al realizar el examen físico de las articulaciones. Los análisis de sangre y orina no resultan alterados por esta enfermedad y solo se utilizan en casos específicos para realizar diagnósticos diferenciales.
Es importante considerar los factores de riesgo, ya que el control de los mismos previenen su aparición y progresión.
También están incluidos los factores traumáticos producto de caídas, fracturas, entre otros, donde el cartílago sufre y con el pasar del tiempo se pone de manifiesto la enfermedad degenerativa.
Los trastornos de alineación en los ejes del miembro inferior, donde mecánicamente la rodilla sufre sobrecargas y a posteriori compromiso de cartílagos, conlleva a manifestaciones degenerativas.
Si usted ha estado expuesto a alguno de los factores y tiene algunos de los síntomas, es mejor visitar al especialista en Ortopedia debido a que cada fase o etapa de la enfermedad tiene soluciones terapéuticas; no todo es quirúrgico, pero es esencial acudir al especialista para su control y manejo, pero lo mas importante es que entre mas temprano inicie el tratamiento, mejores resultados obtendrá.
En el Grupo Médico Santa Teresa tenemos atención en Ortopedia y Traumatología, por lo que puede sacar su cita llamando al ☎ (506) 2798-0100 / 2798-2100, escribirnos al WhatsApp: 8841-7085 o en nuestro sitio web: https://santateresacr.com/cita-online/.